Archive for enero 2013

Especiales Cine L'Atalante: Quentin Tarantino

Desde que debutara en la dirección hace poco más de dos décadas, Quentin Tarantino (Knoxville, 1963) se ha convertido en uno de los realizadores más admirados del cine contemporáneo. A pesar de contar con una filmografía relativamente escasa en estos veinte años, cada nueva película de Tarantino se convierte en un fenómeno que no deja interesante a nadie. Su cine esta lleno de homenajes, referencias y guiños a la historia del séptimo arte, ya sea en su versión culterana (Hawks, Kubrick, Hitchcock) o tomando como punto de partida productos en los márgenes de la industria, y que el propio Tarantino ha contribuido a la encomiable labor de su recuperación y/o descubrimiento por parte del gran público. Géneros como el grindhouse, el terror de serie B, el cine oriental de artes marciales, el spaghetti western o la blaxploitation han pasado por el peculiar filtro tarantiniano y han recuperado una legión de seguidores que hasta entonces llevaban su fanatismo con cierto sonrojo.

En otro de nuestros programas especiales (lo puedes escuchar aquí), el equipo de Cine L'Atalante (formado por Nacho Palau, Héctor Gómez, Jordi Revert, Miquel Tello y la colaboración de Óscar Brox) repasa la filmografía de Quentin Tarantino. Empezamos con su ópera prima oficial, Reservoir Dogs (1992), una película que desde la independencia se ha convertido en uno de los fenómenos clave del cine posmoderno, y que ya anticipa alguno de los rasgos más llamativos de la trayectoria de Tarantino, como la narración acronológica, la estilización de la violencia o su peculiar sentido del humor. Después llegaría Pulp Fiction (1994), la película que dio el espaldarazo definitivo a su carrera y cuyas escenas están incrustadas en el imaginario de todo buen cinéfilo. Recuperando el espíritu de las novelas policíacas baratas de los años 70, Pulp Fiction cruza varias historias de delincuencia, drogas y violencia con el inconfundible sello cool e icónico que Tarantino desprende.

Jackie Brown (1997) es, sin embargo, una de sus películas menos conocidas pero por otro lado más reivindicable. En ella recupera a Pam Grier (heroína de la blaxploitation) para protagonizar la que es quizá la historia de amor mejor trabajada de su filmografía, y donde su tan manida violencia queda en un segundo plano. Una violencia que regresará, en su vertiente más exagerada y estilizada, en el díptico Kill Bill (2003-2004), una película que mezcla varios géneros para narrar la venganza de su protagonista (Uma Thurman) contra la banda de asesinos que intentó acabar con su vida, encabezada por su antigua pareja Bill (David Carradine).

En 2007 Tarantino filmó Death Proof, película que rinde tributo al grindhouse y al cine de sesión doble, siendo el film hermano siamés de Planet Terror, que firma su gran amigo Robert Rodriguez. Y en 2009 realizó su movimiento más arriesgado, acudiendo por primera vez al pasado para ambientar Malditos bastardos, un film con aires de western situado en la II Guerra Mundial. Y precisamente un western (esta vez sí, con todas las de la ley) es su última película hasta la fecha, Django desencadenado (2012), en la que el protagonista (Jamie Foxx), un esclavo liberado, intenta recuperar a su amada de las garras de un despiadado terrateniente (Leonardo DiCaprio), y en las que salen a relucir todas las influencias de Tarantino, desde Sergio Leone a Sam Peckinpah pasando por Sergio Corbucci.




Categorías: | 1 Comentario

Cortometrajes: problemas de pareja


El amor -y el desamor- en todas sus vertientes y posibilidades ha sido el tema por antonomasia del cine desde sus primeros tiempos. En el programa 1x11 de Cine L'Atalante hablamos de amor -y desamor- a través de los dos cortometrajes que nos aporta nuestra compañera Vittoria Zanetti. Dos obras españolas que tienen en los problemas de pareja y sus consecuencias un elemento en común.

El primero de ellos se llama Por ser como eres (2010) y está dirigido por Álvaro Fernández Armero, director de, entre otros, largometrajes como Nada en la nevera (1998), El arte de morir (2000) o Salir pitando (2007), y que realizó cuando fue jurado del festival Notodofilmfest, uno de los festivales de cortometrajes más prestigiosos de nuestro país. En Por ser como eres asistimos a una dura discusión de pareja, en la que la protagonista (Alexandra Jiménez) lee la cartilla a su novio (José Sánchez Orosa), que asiste impasible a la reprimenda hasta el sorprendente giro final.

El segundo cortometraje del que hablamos en el programa lleva por título Quédate conmigo (2011), y es una producción más ambiciosa (destaca la calidad de los efectos visuales y de maquillaje) a cargo de Zoe Berriatúa, y está protagonizado por la televisiva Macarena Gómez. De nuevo partimos de una brutal discusión de pareja, en la que se lanzan los trastos (literalmente) a la cabeza hasta que se produce un fatal desenlace. A partir de entonces encontramos una mezcla de love story necrofílica, gore y toques de humor negro que producen un contraste muy interesante.

Aquí podéis disfrutar los dos cortometrajes de los que estamos hablando:








Categorías: , | Deja tu comentario

Seriefilia: The Wire

Señalar el trasvase de talento que se ha producido en los últimos años desde el cine hacia la pequeña pantalla es un tópico muy manido, pero no por ello deja de tener su parte de razón. Recientemente, son muchos los fenómenos televisivos que se han instalado en el imaginario colectivo de nuestra sociedad, con mucha más fuerza que los largometrajes, inmersos en una época post vacas gordas y con una preocupante crisis de ideas.

Mucha gente ha caído rendida a productos televisivos que han acaparado reconocimientos a nivel de audiencia o en galardones como los Emmy o los Globos de Oro. Desde Los Soprano a Mad Men, o desde Lost a The Walking Dead pasando por Juego de tronos, Breaking Bad o Homeland. Todas ellas fenómenos masivos que saben o han sabido fidelizar a su audiencia y cuya imagen se explota también a través del merchandising.

Pero más allá de esas series mayoritarias hay otras que, más bien en una carrera de fondo, han sabido crearse su propio prestigio al margen de las corrientes mainstream, elevando su estatus hasta la categoría  -tan buscada como a veces banal- de serie de culto. En este último grupo podríamos incluir a The Wire, una de los shows mejor valorados por la crítica de los últimos tiempos.

Emitida en HBO entre 2002 y 2008, la serie creada por David Simon es un producto que escapa de la mayoría de las convenciones de la ficción televisiva. A diferencia de la mayoría de ficciones, no hay en The Wire un protagonista principal o un grupo reducido de ellos, sino que presenta un reparto absolutamente coral donde cada personaje tiene su importancia. Además, aunque está ambientada en los suburbios de la ciudad de Baltimore, donde prolifera la delincuencia y el tráfico de drogas, cada temporada de The Wire está concebida desde un punto de vista temático y que abarca aspectos muy diferentes. Así, a lo largo de las cinco temporadas de la serie se abordan aspectos como la educación, la corrupción política y policial o el papel de los medios de comunicación. Este espectro tan amplio de temas y la variedad de personajes enriquecen una trama que cautiva al espectador y que convierte a The Wire en una serie imprescindible para entender hacia donde se dirige el mundo de la ficción televisiva de nuestros días.

En el programa 1x11 de Cine L'Atalante tuvimos a Elisa Hernández para hablar de esta gran serie. Podéis escuchar el programa aquí.



Categorías: , | Deja tu comentario

Óperas primas e infancias problemáticas

En el programa 1x11 de Cine L'Atalante tuvimos en el estudio a nuestros compañeros Miquel Tello y Paula de Felipe, que vinieron a hablarnos de las películas que el Aula de Cinema de la UV proyecta esta semana.

El miércoles 31 de enero, en el salón de actos de la facultad de Filología de Valencia, se clausura el ciclo de Óperas primas de grandes directores, con el pase de El jardín de la alegría (The Pleasure Garden, 1925). Este film supone el debut tras las cámaras de uno de los más grandes realizadores de la historia del cine, como es el londinense Alfred Hitchcock. El jardín de la alegría tiene algunos aspectos destacables, pero no deja de ser una película de encargo que sirvió principalmente para que Hitchcock se introdujera en la industria del cine. Supone además una buena oportunidad para acercarse a la bastante desconocida etapa británica del director -auspiciada por el productor Michael Balcon-, que contiene títulos tan interesantes como El enemigo de las rubias (1927) o La muchacha de Londres (1929), todavía enmarcadas dentro del cine silente, y las posteriores El hombre que sabía demasiado (1934) o 39 escalones (1935). A partir de 1940, Hitchcock se trasladaría a Hollywood, donde pudo difundir para un público masivo sus historias de suspense e intriga con obras maestras como Encadenados (1946), La ventana indiscreta (1954), Vertigo (1958) o Psicosis (1960).


Por otro lado, el jueves 31 de enero, el Palau de Cerveró (plaza Cisneros, 4) acoge la segunda sesión del ciclo Infancia, salud y enfermedad, en colaboración con el IHMC López Piñero. Este ciclo pretende ser un acercamiento a los problemas relacionados con la infancia, problemas que suponen una de las principales lacras de la sociedad contemporánea. En este caso, la película escogida es Maroa (2006), centrada en la complicada realidad de la pobreza y la exclusión en Venezuela. La protagonista del film es una niña de once años  (Yorlis Domínguez) que vive en un suburbio de Caracas, rodeada de miseria y violencia, y donde la música puede suponer la única tabla de salvación en su vida. El film está dirigido por Solveig Hoogesteijn, veterana realizadora de origen sueco cuyo cine siempre se ha movido por su vertiente más social y reivindicativa.

Recordamos una vez más que todas las sesiones del Aula de Cinema UV son a las 18 horas, con entrada totalmente libre y gratuita. Las películas están precedidas de una presentación a cargo de nuestros compañeros y siempre se produce un interesante coloquio al acabar la proyección. Allí os esperamos.



Categorías: , , , , , , | Deja tu comentario

Especiales Cine L'Atalante: Kathryn Bigelow y P.T. Anderson

En nuestro programa nos hemos propuesto que, además de nuestra estructura habitual (en la que promocionamos las películas que proyecta el Aula de Cinema UV además de secciones de todo tipo), incluiremos de vez en cuando un especial monográfico sobre algún director, género o aspecto de cualquier tipo relacionado con el séptimo arte.

Como siempre que se acerca la temporada de premios, la cartelera se llena de propuestas más que interesantes por parte de alguno de los mejores realizadores del momento, y eso es un buen pretexto para pararse a analizar y reflexionar sobre su filmografía. Así, en estos días hemos aprovechado el estreno de La noche más oscura (Zero Dark Thirty, 2012) y The Master (2012) para dedicarle unos programas especiales a sus directores, Kathryn Bigelow y Paul Thomas Anderson.

Respecto a Bigelow, hablamos de su faceta más curiosa hace algunas semanas, pero en este especial nos detuvimos más profundamente en sus principales películas. Con la presencia de nuestro director y locutor Nacho Palau y las colaboraciones especiales de Jordi Revert y Óscar Brox, el programa transitó por los principales hitos en la carrera de la primera mujer en ganar el Oscar a la mejor dirección. Películas como la adrenalinítica Le llaman Bodhi (1991), Días extraños (1995) y especialmente En tierra hostil (2008) representan sus cotas más elevadas como realizadora, transitando siempre por la senda del thriller y la acción, un terreno casi siempre reservado para directores masculinos pero en el que Bigelow ha sido capaz de imprimir un sello muy personal y una serie de características que hacen sus películas muy reconocibles.

Por lo que se refiere a Paul Thomas Anderson (en cuyo especial participa también nuestro compañero Miquel Tello), se trata sin duda de uno de los realizadores más personales y estimulantes del panorama actual, un director que con apenas seis largometrajes se ha colocado ya como uno de los primeros clásicos del siglo XXI. Sydney (1996) y Boogie Nights (1997), sus primeros trabajos, ya ofrecían aspectos destacables, pero no pudo desprenderse todavía de las comparaciones (nada odiosas, por cierto) con Martin Scorsese o Robert Altman. Sin embargo, a partir de Magnolia (1999), un políptico sobre el azar, las historias cruzadas y los falsos profetas, ya se vislumbraban maneras de gran director, que se confirmaron con la inclasificable Embriagado de amor (2002) y especialmente con dos obras maestras como Pozos de ambición (2007) y la mencionada The Master. Dos películas que el tiempo colocará a buen seguro como clásicos de la posmodernidad, y que proponen (a través de forma y contenido) un viaje tortuoso por las entrañas de la condición humana.







Categorías: | Deja tu comentario

Buscando a Ralph Macchio


En Cine L'Atalante, además de hablar (a veces bien, a veces mal) de cine, no descuidamos una importante labor social. Como si fuéramos Lobatones del siglo XXI, tenemos nuestro propio servicio de búsqueda de aquellos actores y actrices que tuvieron su momento de gloria, de reconocimiento, de primeras páginas en los periódicos y revistas y de su efigie decorando las carpetas de miles de adolescentes en todo el mundo, pero que de repente desaparecieron misteriosamente casi sin dejar rastro.

Y decimos lo de casi porque hay alguien capaz de rastrear en lo más profundo de las filmotecas y en las estanterías menos transitadas de los videoclubs en busca de alguna pista que le lleve a su objetivo. Ese es Jerry Goodman, nuestro cazarrecompensas particular. Su primer caso fue sacar a la luz el paradero de Malcolm McDowell, famoso en todo el mundo por dar vida al protagonista de La naranja mecánica (1971), una de las obras maestras de Stanley Kubrick, pero que desde entonces echó a perder su carrera en películas de cuarta fila o series de TV de escasa audiencia.

Tras algunas semanas de ausencia, el cazarrecompensas volvió en el programa 1x10 para seguir la pista de otro actor del que poco o nada sabemos desde hace años: Ralph Macchio. Quizá el nombre no diga demasiado a mucha gente, pero si decimos que fue el Daniel Larusso (o más bien Daniel San) de The Karate Kid (John G. Avildsen, 1984), entonces casi todos afirmarán recordarlo sin problemas. En aquella película, una de las más recordadas de los años 80, Macchio daba vida al típico adolescente enclenque y perdedor, que acaba siendo campeón de karate gracias a la ayuda del señor Miyagi (Pat Morita, otro ejemplo claro de encasillamiento), un aparentemente inocente japonés con pinta de no haber roto un plato pero que en realidad es todo un maestro en artes marciales. La patada de la grulla, la pelea final en slow motion y el dar sera, pulir sera forman parte de nuestro imaginario colectivo.

Ralph Macchio disfrutó, pues, de una fama mundial con esta película y sus dos secuelas (en 1986 y 1989), pero más allá de la saga karateka poco sabemos de él. Participó en Mi primo Vinny (Jonathan Lynn, 1992), que le valió el Oscar a Marisa Tomei, pero más allá de aquello sólo lo podemos encontrar en pequeños papeles en televisión y, sorprendentemente, en la próxima Hitchcock (Sacha Gervasi, 2012), en la que da vida al guionista de Psicosis. Demasiado poco bagaje para un actor que prometía comerse el mundo y que ha acabado siendo carne de cañón para esta sección tan entrañable.




Categorías: , | Deja tu comentario

Óperas primas de grandes directores (II): Ingmar Bergman

El Aula de Cinema UV tiene preparado para este mes de enero un ciclo muy especial. Ya que se trata del primer mes del año, hemos optado por programar las primeras películas de algunos de los mejores directores de la historia del cine. Hemos procurado que el recorrido sea variado cronológica, geográfica y estilísticamente, para ofrecer una visión lo más completa posible de lo que puede suponer una ópera prima.

En la primera sesión, el 9 de enero, proyectamos El diablo sobre ruedas (Duel, 1971), la primera película de Steven Spielberg, que por aquel entonces era un completo desconocido pero que después filmaría alguno de los films más icónicos de los 70, 80 y 90, como Tiburón (1975), Encuentros en la tercera fase (1977), E.T. el extraterrestre (1982), La lista de Schindler (1993), Parque jurásico (1993) o la saga de Indiana Jones.

Para la segunda sesión, que tuvo lugar el miércoles 16 de enero, el director elegido fue el sueco Ingmar Bergman y su debut tras las cámaras, Crisis (Kris, 1946). Procedente del mundo del teatro, es muy evidente en el primer Bergman su planificación teatral en cuanto a decorados e interpretaciones, pero ya desde esos primeros films empiezan a apuntarse las obsesiones que se repetirán a lo largo de toda su filmografía: la falsedad e hipocresía de las relaciones entre la burguesía acomodada, las relaciones turbulentas de padres e hijos o los tabúes morales. Un poco más tarde llegaría el existencialismo y la búsqueda de Dios, reflejado en películas imprescindibles como El séptimo sello (1957), Como en un espejo (1961), Los comulgantes (1963) o su experimental y críptica Persona (1966).

De todo ello hablaron Nacho y Héctor en el programa 1x10 de Cine L'Atalante, en el que además recordaron las películas que completarán el ciclo y que serán La cosecha estéril (Bernardo Bertolucci, 1962) y El jardín de la alegría (Alfred Hitchcock, 1925), dos óperas primas de dos directores europeos muy diferentes entre sí pero que pueden resultar altamente estimulantes.




Categorías: , , , | Deja tu comentario

Tropecines: basta ya de nazis y Guerra Civil

Nuestra sección Tropecines, perpetrada e instigada por nuestro compañero Miquel Tello, se caracteriza por ofrecer una visión diferente y políticamente incorrecta de ciertos aspectos del cine que normalmente quedan ocultos o sobre los que no es cómodo hablar. En Cine L'Atalante, sin embargo, no tenemos pelos en la lengua y no nos cortamos en absoluto a la hora de denunciar los tópicos, las manipulaciones interesadas o los arranques vacíos de pedantería de los que está llena la historia del cine.

El objetivo concreto del Tropecines del programa 1x10 fue el cine sobre la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial, ejemplificado en dos películas concretas. Es innegable la ingente cantidad de films que se han realizado sobre la contienda bélica más cruenta de la historia de la humanidad, por parte de casi cualquier país y desde una perspectiva que abarca todo tipo de géneros. Como pasa siempre que hablamos de un gran número de títulos, las obras maestras se mezclan con las películas de calidad ínfima, por lo que nos llevaría demasiado tiempo establecer una taxonomía razonable de esta especie de cajón desastre.

No obstante, sí nos podemos centrar en algunos aspectos que caracterizan en demasiadas ocasiones los films sobre estos dos conflictos y que son el objeto del ataque inmisericorde de Miquel. Estos aspectos son, básicamente, el excesivo maniqueísmo en el retrato de los personajes -con una línea muy clara que separa buenos y malos- y la manipulación de los sentimientos del espectador por parte del director, quien mediante el montaje o la banda sonora indica los momentos en los que debemos llorar, sentir empatía, rabia, etc.

Esto ocurre de forma muy evidente en La lista de Schindler (Schindler's List, 1993), película que Steven Spielberg filmó para exorcizar los fantasmas de su propio pasado, siendo él un judío que nació en la época en la que muchos de sus correligionarios fueron exterminados en los campos de concentración. La película, reconocida con numerosos Oscars, no deja de ser una cinta muy valorable, una historia perfectamente contada por parte de uno de los mejores storytellers del séptimo arte. Pero hay en ella también ese poso de manipulación sutil que hace que el espectador tome partido irremediablemente, sin necesidad de plantearse otras opciones o de hacer una valoración crítica de lo que está viendo.


En el caso de la Guerra Civil Española, Miquel saca a colación Las 13 rosas (2007), película de Emilio Martínez-Lázaro que contó con la presencia de rostros de carrera prometedora surgidos del mundo de la TV (Laura Sánchez, Fran Perea, Miren Ibarguren, Nadia de Santiago), además de actrices consolidadas como Marta Etura, Pilar López de Ayala o Goya Toledo). A pesar del loable esfuerzo de recordar la desgarradora historia de este grupo de mujeres republicanas fusiladas durante la contienda, el film tiende irremisiblemente hacia la simplificación del argumento y la tendenciosidad del guión, buscando la lágrima fácil del espectador a costa de que éste no se plantee los matices de la historia.

En resumen, por mucho que todos tengamos una posición ideológica respecto a un conflicto, y por mucho que esa posición coincida con la mostrada por el director o el guionista del film, no debemos dejar de señalar que tienen mucho más valor como objeto artístico aquellas películas que permiten al espectador tener herramientas para construir su propio significado, y no aquellas que ofrecen sentimientos masticados y que hacen que otros hayan pensado por ti.



Categorías: , | 2 Comentarios

Al rescate: Diamond Flash


En nuestro programa, la sección Al rescate está concebida como un espacio para reivindicar aquellos films que fueron masacrados en su día por la crítica, ignorados por los espectadores u olvidados por los estudios sobre cine, pero que en cualquier caso poseen unas cualidades que les convierten en productos altamente estimulantes cuando no directamente en películas de culto, un término muy manido en estos tiempos pero que permite entender perfectamente la situación.

En el programa 1x09 de Cine L'Atalante, Héctor Gómez habló en la sección Al rescate sobre Diamond Flash (2011), una de las mejores películas del cine español de los últimos tiempos pero que sigue estando al alcance tan solo de los verdaderamente interesados en un tipo de cine diferente al que navega por los circuitos mayoritarios. Estrenada directamente en DVD (Cameo) y en la plataforma de VOD Filmin, Diamond Flash no ha seguido los cauces habituales de distribución y no ha pasado por las salas de cine, por lo que sigue siendo un film muy desconocido para el gran público.

Con un presupuesto de apenas 20.000 euros, un equipo técnico reducido a la mínima expresión (la dirección, producción, guión, montaje y fotografía corren a cargo del madrileño Carlos Vermut), unos actores desconocidos y con el dispositivo de vídeo de una cámara de fotos como tomavistas, la película es por tanto una rareza dentro de nuestro cine, sobretodo si tenemos en cuenta que esta escasez de medios no repercute negativamente en el magnífico resultado final del film.

Diamond Flash es una película diferente, inclasificable, sorprendente, única. Una mezcla de géneros y de estilos que oscilan entre la ciencia-ficción sin efectos especiales, el thriller o el drama social. Aspectos ya esbozados en los cortometrajes Maquetas y Michirones (ambos de 2009), films en los que Carlos Vermut saltaba al cine desde el mundo de la ilustración y los cómics. Y es que hay mucho de cómic y de cultura popular y underground en Diamond Flash, una película que se disfruta mucho más sin saber nada de ella ni sobre su argumento, pero que en definitiva constituye un soplo de aire fresco en la anquilosada industria cinematográfica española, tan necesitada de propuestas frescas y diferentes como ésta, aunque por desgracia todavía demasiado invisibles.



Categorías: , | Deja tu comentario

El cine erótico a través de los tiempos

Con el año nuevo empezamos una sección en el programa 1x09 de Cine L'Atalante. Xelo Agustín nos acompañó por primera vez para hacer un repaso desde el punto de vista histórico del cine erótico, un tipo de cine muchas veces ninguneado por la crítica por sus imágenes explícitas o sus argumentos incómodos, pero que sin duda posee una enorme legión de seguidores en todo el mundo y en todas las épocas. Cabe diferenciar, eso sí, el cine erótico del pornográfico, siendo el segundo un tipo de cine mucho más codificado y definido, y con una industria paralela que mueve miles de millones en todo el planeta. El cine erótico, por su parte, no resulta tan explícito, y sus desnudos o escenas sexuales suelen estar justificadas en la trama o tener una intención estilística o expresiva determinada.

El repaso da comienzo con los primeros cortometrajes de los años 20 que sirvieron de distracción (y quién sabe qué más) al rey Alfonso XIII, un conocido erotómano. Las décadas de los 30, 40 y 50 tuvieron que lidiar con el férreo Código Hays, y apenas encontramos salidas de tono en ese striptease de guante de Rita Hayworth en Gilda (Charles Vidor, 1946).

Al calor de las revoluciones sociales de los años 60, el cine manifestó un claro aperturismo en los temas y en las imágenes, donde casi por vez primera se podían ver desnudos y mujeres voluptuosas ligeras de ropa con cierta asiduidad. Sobretodo en el cine de Russ Meyer, dedicado casi por completo a la exhibición de cuerpos exageradamente dotados, un cine de serie Z que tanto ha influido en la cultura underground y en cinéfagos como Quentin Tarantino.

Los 80 serían la década del thriller erótico, en el que el tema de la femme fatale -tan habitual en el noir de los 40- sufre una vuelta de tuerca, y esta vez las mujeres son auténticas devoradoras de hombres a los que utilizan y destruyen a su voluntad con sus armas de mujer. Películas como Fuego en el cuerpo (Lawrence Kasdan, 1981), Atracción fatal (Adrian Lyne, 1987) y sobretodo Instinto básico (Paul Verhoeven, 1992) son buenos ejemplos de esta tendencia.

Así pues, el cine erótico se ha podido expresar a veces con dificultades, pero siempre ha estado presente en la historia del séptimo arte, tanto en Hollywood como en la vieja Europa o en otras culturas (pensemos, por ejemplo, en El imperio de los sentidos de Nagisa Oshima). Todos sabemos que el sexo vende, y que todavía un cuerpo desnudo sigue siendo un buen reclamo para atraer a los espectadores.





Categorías: , | Deja tu comentario

Mind-game films en la revista L'Atalante

En el programa 1x09 de Cine L'Atalante, nuestra compañera Violeta Martín nos habló de la revista L'Atalante, un proyecto del Cinefórum L'Atalante que surgió hace ya una década y que desde entonces ha recogido artículos, entrevistas y ensayos dedicados al mundo del cine, desde una perspectiva académica pero con vocación de llegar también al gran público. 

Cada uno de los números de la revista -se publican dos cada año, con periodicidad semestral- se articula en torno a un tema principal (el cuaderno) que sirve como hilo conductor de los diferentes ensayos que configuran la publicación. Además del cuaderno, siempre hay una entrevista (diálogo), una discusión -llamada (des)encuentros- en la que se recaba la opinión de expertos sobre un tema concreto, y una sección miscelánea (puntos de fuga) compuesta de artículos de temática variada pero que siempre reflexionan en torno al mundo del lenguaje cinematográfico.

En esta ocasión, Violeta nos presentaba el número 15 de la revista L'Atalante (titulada "El trauma en la trama"), que se pone en circulación en este mismo mes de enero, y cuyo cuaderno gira en torno de los mind-game films. El término mind-game film fue acuñado por el prestigioso profesor Thomas Elsaesser, quien además abre la revista con uno de sus ensayos, y se refiere a las películas cuya narración no sigue un sentido lineal, sino que su trama está estructurada en forma de rompecabezas y es el espectador quien las dota de sentido. Elsaesser toma como referencia a David Lynch (uno de los directores más habituales en este tipo de narración dislocada) y su trilogía de Los Angeles, centrándose especialmente en Inland Empire (2006) para analizar el críptico lenguaje de Lynch y que tanto esfuerzo requiere por parte de los espectadores.

Además de David Lynch, en los diferentes artículos del cuaderno se hace referencia a Origen (Christopher Nolan, 2010), Los cronocrímenes (Nacho Vigalondo, 2007), 21 gramos (Alejandro González Iñárritu, 2003) o la serie de TV Breaking Bad (Vince Gilligan, 2008-?), entre muchos otros. El número cuenta además con una entrevista de Óscar Brox al director vasco Enrique Urbizu, en la que se repasa la trayectoria del realizador y sus opiniones sobre el cine de género. En (des)encuentros se plantea una discusión sobre las retóricas delirantes, y los puntos de fuga incluyen artículos sobre Julio Medem, Isabel Coixet o el debut en el largometraje de Michael Haneke, El séptimo continente (1989).



Categorías: , | Deja tu comentario
Con la tecnología de Blogger.

Buscador

Swedish Greys - a WordPress theme from Nordic Themepark. Converted by LiteThemes.com.